Fibra y salud cardiovascular
Según datos de la Organización Mundial de la Salud, en el mundo, cada vez muere más gente debido a alguna enfermedad cardiovascular, más que por cualquier otra causa. Se estima que para el año 2030 casi 25 millones de personas morirán de alguna enfermedad del corazón.
Las enfermedades cardiovasculares son un grupo de padecimientos que afectan los vasos sanguíneos (venas, arterias) y el corazón. Durante la enfermedad se puede afectar el flujo de sangre a órganos importantes como el corazón (enfermedades coronarias) o el cerebro (cerebrovasculares). También existen los padecimientos congénitos del corazón donde se presentan malformaciones físicas en la estructura del corazón o los vasos.
Causas de las enfermedades cardiovasculares
Una de las razones más comunes de los infartos cardiacos es el bloqueo de las arterias por depósitos de grasa que se forman en las paredes de ésta. Dichos depósitos también conocidos como ateromas, impiden o dificultan el paso de la sangre, en consecuencia se aumenta la presión sanguínea para que el corazón, el cerebro y otros órganos puedan recibir la sangre que necesitan para funcionar.
Las enfermedades cardiovasculares pueden tener diversas causas o factores que generan mayor predisposición a la enfermedad. Entre estos factores se encuentran la genética, la raza, el sexo y la edad -que no se pueden modificar- y otros como el estilo de vida, actividad física, dieta, tabaquismo y el consumo de alcohol. Se ha determinado que estos factores modificables son responsables del 80% de los casos de enfermedades cardiovasculares.
Cuida tu corazón por medio de la alimentación
Según la Academy of Nutrition and Dietetics de Estados Unidos (antes American Dietetic Association), la ingesta de fibra tiene efectos positivos en la prevención de enfermedades crónicas.
La recomendación de consumo de fibra que se hizo originalmente fue derivada de diversos estudios epidemiológicos que demostraron que la fibra dietética tiene un efecto protector y de reducción de riesgo de enfermedades cardiovasculares, es decir, las recomendaciones de ingesta de fibra de hoy en día se basan en su efecto para prevenir muertes y enfermedades del corazón.
La fibra dietética es la parte de los alimentos de origen vegetal (frutas, verduras, cereales, leguminosas) que principalmente da estructura a la planta, pero que cuando es consumida por humanos no puede ser digerida por nuestro sistema (pasa de manera intacta hasta el colon donde las bacterias que lo habitan fermentan la fibra y la utilizan como alimento).
Asimismo, la fibra actúa de distintas maneras para prevenir la enfermedad cardiovascular, por ejemplo, ayuda a disminuir la absorción de grasa en el intestino o, bien, puede inhibir la formación de grasa por parte del hígado, lo que nos ayuda a mantener el colesterol en niveles saludables.
Por otro lado, también se ha visto que algunos componentes de la fibra, con acción antioxidante, disminuyen la inflamación en el cuerpo (la inflamación se presenta en muchas enfermedades crónicas). Al disminuir esta inflamación, se reduce el riesgo de las enfermedades cardiovasculares y sus complicaciones.
En conclusión, un consumo de 30 gramos de fibra diariamente es un factor muy importante que contribuye, junto con otros elementos, a mantener un corazón saludable por más tiempo.
Fuente: Forbes México.